Durante el paso de la corriente eléctrica se producen pérdidas de energía porque los electrones que forman esta corriente sufren colisiones. A este fenómeno se le llama resistencia. La energía cinética de los electrones se pierde en forma de calor lo que se denomina efecto Joule. El efecto Joule es el mecanismo de funcionamiento de las planchas, tostadoras, estufas eléctricas, etc.
Un superconductor no presenta resistencia al paso de corriente. Por lo tanto, un superconductor puede conducir corriente indefinidamente sin pérdida de energía aunque esté desenchufado (perpetuum mobile). No contradice ninguna ley de la termodinámica porque primero se conecta el superconductor a una fuente de alimentación y una vez generada la corriente se desconecta. Por lo tanto la energía no proviene de la nada sino que se conserva. En diversos laboratorios se ha comprobado que al cabo de los años la corriente no decrece ni el campo magnético creado por ella. Por lo tanto un circuito superconductor se puede utilizar como acumulador de corriente para almacenar energía o para crear los campos magnéticos más potentes del mundo (véase aplicaciones). Esta propiedad tan sorprendente no se entendió hasta que se propuso la teoría BCS.
Vídeo cortesía de Julien Bobroff, Université Paris-Sud.